Cada una de estas tazas fue modelada a mano, con formas irregulares y curvas suaves que celebran lo imperfecto. No hay dos iguales: cada pieza es única, con su propia altura, textura y personalidad.
Hechas en cerámica, en un tono natural y orgánico, con una capacidad de 230 ml.
La altura puede variar entre 6 y 7 cm, como parte de su belleza imperfecta.
Ideales para acompañarte en momentos de pausa, café en mano y alma en calma.
Cada pieza sale de nuestro taller embalada con muchísimo cuidado: usamos pluribol, caja reforzada y cinta “Frágil”, porque sabemos cuánto amor hay detrás de cada pedido.
De todos modos, una vez que el paquete es entregado al correo, el traslado queda a cargo de una empresa externa. Por eso, no podemos responsabilizarnos por daños que pudieran ocurrir durante el envío.